15 sept 2011

DIA 1

El viaje a Cíes en barco desde Vigo fue horroroso, pues no se vislumbraba la isla por la niebla.
Al poner los pies en la isla, el sol empezó a brillar con todo su esplendor y nos dejó ver el maravillosos Parque Nacional que tenemos enfrente de nuestra ciudad.
Ya de camino al camping estuvimos acompañados de algunas gaviotas. De hecho, dos de ellas entraron sigilosamente en la tienda para comer el pan de molde.
Aviso para los futuros navegantes: dejar la comida bien guardada para que no se la lleven las gaviotas. Gracias.
La verdad es que son unas aves muy tranquilas aquí, no se asustan y conviven perfectamente con los seres humanos.
El primer día, disfrutamos de la playa toda la tarde y fuimos al Alto del Príncipe donde se pueden ver las dos caras de la isla; la que da a la ría y la que da a la inmensidad del Océano Atlántico.